La ciudad de Los Ángeles, en California, es famosa por Hollywood, la
quinta esencia del sueño americano. Pocos saben que con sus 5 millones de
católicos es también la diócesis más grande de Estados Unidos. Todo un desafío
para su nuevo arzobispo, José Gómez.
Mons. José Gómez
Arzobispo de Los Ángeles (Estados Unidos)
“Los Ángeles es una ciudad de muchos inmigrantes. Tenemos Misas en 42
idiomas. Tenemos inmigrantes de todo el mundo que viven ahí en Los Ángeles”.
José Gómez ha visitado Roma para recibir el palio de manos de Benedicto XVI. Como director del Comité de Migraciones de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, hablamos con él sobre los problemas ligados a la inmigración.
Mons. José Gómez
Arzobispo de Los Ángeles (Estados Unidos)
“Lo primero es la dignidad humana, que las personas que tienen derecho a
trabajar y a buscar un lugar donde puedan proveer por su familia. Y también es
muy importante la unidad de la familia.”
Los problemas ligados a la emigración son muy complejos. En Estados Unidos hay unos 12 millones de inmigrantes sin papeles. En Los Ángeles el 70% de los católicos son latinos y muchos de ellos están en el país de manera ilegal. Por eso, miles de ellos son deportados y separados de sus familias.
Mons. José Gómez
Arzobispo de Los Ángeles (Estados Unidos)
“Yo no tengo la solución. Yo no soy político, soy pastor de almas y mi
presión es rezar para que el problema se solucione”.
El arzobispo Gómez es también un inmigrante. Nació en México hace 59 años, y su familia vive en la frontera con Estados Unidos. Dice que siempre ha vivido entre dos culturas. Y asegura que la inmigración no es un problema político sino una cuestión relacionada con la dignidad humana. Por eso, existe un modo más humano de afrontar el desafío de la inmigración.
Mons. José Gómez
Arzobispo de Los Angeles (Estados Unidos)
“Ayudándonos unos a otros, compartiendo nuestras culturas y al mismo
tiempo relacionándonos. Yo pienso que es un ejemplo muy claro de cómo será el país
en el futuro, y cómo los inmigrantes traen muchas bendiciones a los Estados
Unidos.”
En cualquier caso, aunque queda mucho para que la inmigración no sea un problema, ahora todos los implicados están de acuerdo en que no puede seguir ignorándose durante más tiempo.
Fuente: www.romereports.com
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